Desde el grupo municipal Irabazi
Barakaldo venimos demandando la necesidad de la elaboración y la posterior
puesta en marcha definitiva de la estructura participativa destinada a elaborar
los presupuestos. El pasado 29 de julio el equipo
de gobierno presentaba un borrador, abierto a propuestas y debate, que divide el territorio en tres distritos.
Se explicaba al resto de grupos que la propuesta viene justificada en la
división demográfica, territorial y de equipamientos de la ciudad, y se
vinculaba directamente a la descentralización de la administración local, pero
también a unos futuribles procesos participativos.
Queremos destacar dos cuestiones
a tener en cuenta:
- Consideramos que la división administrativa y participativa deben ser las mismas, en un caso óptimo. Esto mejoraría notablemente la vida en los barrios y evitaría desplazamientos intra-ciudad. Es uno de nuestros objetivos programáticos: esponjamiento de la ciudad y refuerzo de los barrios. Sin embargo, a día de hoy, no es posible descentralizar el SAC a todos los barrios dada la política de austeridad impulsada por los últimos gobiernos municipales; no se pueden cubrir diez puestos con dos personas. En consecuencia, y en tanto en cuanto no se tomen medidas para ampliar la plantilla, la división administrativa en tres distritos parece el único objetivo asumible, si bien podrían planearse oficinas móviles para llegar a los barrios más alejados al menos una vez por semana.
- La participación ciudadana se garantiza cuando la ciudadanía se siente identificada. El ejemplo más evidente lo encontramos en la diferencia entre las fiestas de barrio y las fiestas de Karmenak; mientras las primeras llegan a reunir más de mil personas en las comidas populares, Karmenak, siendo las generales, apenas llegan al medio millar. La gente participa de aquello que considera suyo, por lo tanto los Consejos Participativos deben estar pegados al territorio y la identidad de barrio. Unos consejos participativos que dividen la ciudad en tres basándose en consideraciones estadísticas están avocados al fracaso, o al fraude.
Es por ello que desde Irabazi
Barakaldo estamos trabajando en una
propuesta que divide el municipio en diez distritos participativos (San
Vicente, Beurko-Bagazta, Lasesarre-Desertu, Rontegi-Larrea, Lutxana-Llano, Arteagabeitia-Zuazo,
Retuerto-Kareaga, Gorostiza-Errekatxo, Basatxu-Gurutzeta y Burtzeña-Zubileta). Se
trata de una propuesta completamente
abierta a modificaciones, que está
siendo contrastada durante este mes con las Asociaciones de Vecinas y Vecinos. Posteriormente,
registraremos nuestra propuesta antes del 15 de setiembre, fecha límite
establecida para la realización de aportaciones.
Desde el grupo municipal Irabazi
Barakaldo creemos que la estructura
participativa de Barakaldo debe nacer desde el máximo consenso posible
entre la comunidad y todos los grupos políticos. Además, destacamos que estas estructuras son modificables, y
que será la experiencia de las mismas las que irán optimizando su
funcionamiento. Creemos que lo importante es acordar una buena base, donde los vecinos y las vecinas nos
sintamos identificadas, y comencemos a trabajar
en el auto-reglamento que deberá regir los presupuestos participativos de 2018.
Necesidad de recursos
Finalmente, desde Irabazi
queremos insistir en que es necesario
dotar de recursos el área de participación ciudadana. En este sentido,
nuestro grupo presentó enmiendas al presupuesto en vigor para contratar una técnico
de participación, y fue rechazada con los votos del PNV y PSE. Sin recursos humanos y económicos, la nueva
estructura participativa de Barakaldo está avocada al olvido, como ya
ocurrió con el reglamento de 2001, que nunca llegó a desarrollarse.
Eder Álvarez Rivera
Portavoz del grupo
municipal Irabazi